Madrid, 19 de Febrero de 2024. Actualmente se está tramitando el Reglamento Europeo de morosidad y FENIE, la Federación Nacional de Empresas de Instalaciones Eléctricas, Telecomunicaciones y Climatización de España, a través de la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad, PMcM, organización de la que es miembro, ha sido conocedora que determinados grupos parlamentarios han presentado un conjunto de enmiendas a la propuesta de Reglamento de Plazos de pago de la Comisión Europea, basadas en el argumento de la “libertad del pacto entre las partes”.
Las enmiendas propuestas abren la posibilidad, para determinadas operaciones comerciales, de alargar los plazos de pago a más de 30 días siempre que se especifique en el contrato, y que dicha prolongación no sea “manifiestamente injusto” para el acreedor.
Desde FENIE, se rechaza esta propuesta porque, aunque la enmienda propuesta excluiría la posibilidad de aplicación entre pymes y grandes empresas o la administración, la experiencia demuestra que las compañías más grandes disponen de los medios para obviarla si, por ejemplo, se firmaran los contratos a través de compañías interpuestas de menor tamaño.
Además, se sostiene desde FENIE que, en el caso que se firme un contrato por una gran empresa a través de una compañía de menor tamaño o que se aplique una cláusula que no sea manifiestamente injusta, las pequeñas empresas y autónomos no tienen capacidad para demostrar ante la autoridad competente estas situaciones por lo que les supondría un alto grado de indefensión. Del mismo modo, para la administración también supondría, en la práctica, un control imposible de la legalidad de los plazos de pago.
Así mismo, las enmiendas incluyen la eliminación del control de pagos a subcontratistas en la contratación pública perjudicando a éstos, al no existir control alguno ni responsabilidad por parte de las Administraciones Públicas.
Desde FENIE indican que la principal motivación del reglamento, tal y como se trasladaba en la exposición de motivos, era la de establecer mecanismos que contribuyesen a que las grandes empresas dejasen de financiarse de las pequeñas empresas a través del aplazamiento de los pagos y con estas medidas que han salido a la luz, desde FENIE sostienen que la publicación del reglamento carecería de sentido dado que, no es que solucione el problema, si no que estaría dotando de mayores herramientas a las grandes empresas para abusar de las pequeñas empresas y autónomos.